Etiquetas

miércoles, 29 de marzo de 2017

Una noche interminable - por Nico Rogge.


Di por terminado mi plato de salmón y me dispuse a lavar la vajilla. Estando la cocina limpia, decidí cerrar los postigos del enorme ventanal. Afuera, el negro cielo se veía opacado por el resplandor de las estrellas que brillaban con una fuerza jamás vista. Aproveché la ocasión para disfrutar el espectáculo y me recosté cómodamente en mi reposera plegable. Divisé fácilmente la Osa Mayor y Las Tres Marías pero me costó encontrar mi constelación preferida: la Cruz del Norte. Al cabo de un largo rato conseguí localizarla, pero cuando me disponía a contemplarla escuché un ruido ensordecedor proveniente del interior de mi casa de campo. Estupefacto, me puse de pie y me dirigí sigilosamente a ver qué ocurría.

sábado, 25 de marzo de 2017

Una familia perfecta - por Marisol.


Marcaba el reloj las 11:45 de la noche, Marta, Pablo y su hijo Martín miraban la televisión, en ella pasaba una de esas películas policíacas que te mantienen entretenido todo el tiempo… Marta, una reconocida escritora de aquel pueblo; Pablo un gran fotógrafo galardonado y su tierno Martín, un niño de 7 años, un chico común y corriente. Era una noche lluviosa, como todas aquellas en el invierno de ese pueblito alejado de la gran ciudad, un pueblo tranquilo en donde la mayoría de la gente se conocía entre sí.

miércoles, 22 de marzo de 2017

Una vida envidiable - por Okami.


El hartazgo del sueño me levanta. Me giro del lado equivocado de la cama y me dirijo al baño,  paso al lado del espejo y me miro. Me quito la camisa  y al hacerlo veo mi monumento a la estupidez humana, las cicatrices inundan mi cuerpo, como si quisieran ser vistas, pero no, nadie debe saber que las tengo o porque las tengo.

domingo, 19 de marzo de 2017

“Susana decide morir” - por Alejandro Perez


Tic tac, tic tac… Por la ventana se cuela el zumbido de un neón callejero que satura el ambiente. Golpes en la pared. Ella abre los ojos y se levanta de la cama. Lo intuye, algo va mal. No pueden apenas apreciarse colores en la oscuridad de la noche. Sirenas de policía a lo lejos; disparos.

jueves, 16 de marzo de 2017

Susurros - por Nieves.


Cuando Juan se traslado a su nuevo apartamento, se quedo prendado del encanto que desprendía un edificio tan antiguo. Con una enorme entrada de suelos de mármol y una escalera por donde pasaban hasta tres personas a la vez, el hueco de la escalera bien podía dar cabida a dos coches.
 Tenía las barandas de balcones y escalera trabajadas por las artesanas manos de algún herrero maestro; El apartamento era amplio y con muebles antiguos también, una cama con dosel, la bañera con patas de bronce….
Un día, después de dos años de vivir en aquella casa, descubrió que  un armario de la cocina no coincidía en profundidad con el resto y decidió investigar, efectivamente… el armario tenía un doble fondo.

miércoles, 15 de marzo de 2017

Transmutación - por Neogeminis.



En su otra vida fue poeta, pintor, bohemio, apasionado por desentrañar todos los misterios. Exploró, inquirió, expuso, intentando descubrir las leyes del Caos y el Orden, de la Luz y la Oscuridad, de las Partes y el Todo. Su impaciencia por contemplar, saber y comprender fue siempre su más persistente característica.
A pesar de su intensidad y pasión puestas en todo lo que hacía, no lograba ser feliz. Quizás su insatisfacción personal deviniera de su propia exigencia, tanto como para los demás como para su propia obra.

domingo, 12 de marzo de 2017

Vanidad - por Luiselis


Siempre fui hermosa, perfecta, elegante, pero quería más, quería ser más hermosa, incluso más que la diosa Afrodita. Los días pasaban y mi cuerpo y rostro envejecían, hice todo para detener el tiempo; cremas costosas, cirugías en cada extremo de mi cuerpo, inyecciones en mi rostro. Pero el tiempo seguía…

jueves, 9 de marzo de 2017

Mi amigo imaginario - por R0661

Aún recuerdo cuando era niño, esa tierna etapa donde todo era felicidad, o amenos para otros niños, siempre fui una persona que no socializaba mucho no era bueno asiendo amigos y eso hizo que prefiriera estar solo, al principio no era malo, disfrutaba de mi soledad pero al tiempo eso hizo lo que cualquier otro niño en mi posición haría, cree un amigo imaginario, lo llame señor sonrisas por la mueca que él siempre tenía en sus labios semejando ese particular gesto, por alguna razón no tenía ojos lo que lo hacía algo siniestro porque sentía aun así una mirada de esa parte de su cara, ese tono de piel pálida azulada no ayudaba mucho, tampoco que en toda mi infancia el no dijo ninguna palabra, se limitaba a seguirme a escucharme, me gustaba hacerle preguntas de si o no pues es lo único que me respondía moviendo la cabeza, aún recuerdo a mi madre decirme que esos amigos con forme crecía se irían para dejarme convertirme en un adulto, él nunca se fue, con forme crecía esa sonrisa se convertía en una más siniestra, juraría que sus dientes no todo el tiempo fueron puntiagudos, en partes del día no lo veo pero siento su presencia, a veces cuando no lo veo me gusta acercarme a niños bebitos por alguna razón ellos si lo ven siempre se le quedan viendo y es cuando lo encuentro podría decirse que es nuestro juego de las escondidas, algunos animales también lo ben y a veces juegan con él, domando eso me pregunto ¿soy solo yo el que lo ve como alguien siniestro?

Me gusta cuando me deja dormir no es todo el tiempo muchas veces sueño con el pero en mis sueños él es un poco más agresivo por decirlo, su presencia se vuelve más lúgubre, más fuerte y menos consoladora, es frustrante que casi todo el tiempo me sienta observado por él, pero con el tiempo se acostumbra, leí una nota que a estos seres se les llamaba “tulpas” pero aun que encuentro muchas similitudes con él a estos seres no lo siento como uno, es difícil explicarlo más bien diría que es un ser independiente a mí pero que por alguna razón decidió quedarse con migo.
Sentir su presencia es algo a lo que ya me acostumbre a estado con migo 17 años y hoy tengo 24, lo curioso es que él ha tratado de comunicarse con migo, ¿recuerdas que te dije que él no decía una sola palabra? Esto tiene poco menos de un año, a tratado de hablar pero no sale ningún sonido de su boca solo gesticula, pero creo que no es nada bueno porque juraría que leí en sus labios la palabra muerte, no ayudo cuando por poco me atropella un carro, o me ataco un perro que estaba jugando con él o un bebe me miro con cara de miedo después de verlo a él, hace poco casi tuve un accidente vehicular de lo más raro, me pregunto si son simples casualidades o algo más, en fin su sonrisa se a echo más grande creo que se le ocurrió otro plan.

domingo, 5 de marzo de 2017

Ansiedad



Intentaba dormir mientras me removía en la cama, el corazón pesado, la respiración agitada y pensaba que dormido estaría mejor, ¿por qué no me calmo? Tengo sueño, quiero dormir pacíficamente. Me doy vuelta, luego otra vuelta y empiezo a despertar poco a poco. Veo al reloj. Son las 7:30. ¿Pero cómo, si me fui a dormir a las cuatro?


Recordé que llegué algo alegre, tumbé algunas cosas, pero estaba bien. Pase a recordar aquel bar, mucho Rock n`Roll, muchas personas agradables, pero la atmósfera era pesada. Intenté dormir otra vez, pero no lo conseguí. Me empezó a dar frío, mucho frío y los pensamientos de culpa no se iban de mi mente. Pensaba que después tendría que arreglarme para viajar, pero no me sentía bien. ¿Cómo salir de aquella cama si no me siento bien?

miércoles, 1 de marzo de 2017

Los 6 arquetipos del amor


A despecho del rigor filosófico de los amantes, que adivinan en su amada todas las formas posibles de amar; existen algunos arquetipos que segmentan el amor en 6 categorías.

Dante Alighieri , menos modesto, pensó en nueve.

Esta clasificación responde más al ocio burgués de los investigadores que a una necesidad real de establecer niveles dentro del amor. No obstante estas objeciones pedantes, resulta interesante indagar, e incluso cuestionar encendidamente, la propuesta científica.

Recorramos entonces los seis arquetipos del amor.