2. ¿Tienes problemas para escuchar a alguien en una fiesta?, utiliza tu oreja derecha, es mucho más hábil para captar el habla rápida, mientras que la izquierda es más eficiente con los tonos musicales.
3. Si necesitas tranquilizarte y no tienes un baño cerca (ya sea para mojar tu rostro o para una sesión intensiva de FAP!), fantasea sobre tus relaciones. Esto mantendrá a su cerebro ocupado y te tranquilizará.
4. La próxima vez que el médico aplique una inyección, TOSE una vez que hayan retirado la aguja. La tos aumenta el nivel de presión en el conducto raquídeo, lo que limita la sensación de dolor en su intento por viajar al cerebro.
5. Limpia la nariz tapada o alivia la presión de los senos nasales presionando tu lengua contra el paladar y luego presionando entre medio de las cejas con uno de tus dedos. Repetir esto durante 20 segundos hace que el hueso Vómer alivie la congestión y limpie la nariz.
6. Si comiste demasiado y te sientes demasiado lleno como para ir a dormir, recuéstate sobre tu lado izquierdo, eso evitara el reflujo ácido manteniendo más abajo el estómago que el esófago.
7. Puedes detener un dolor de muelas frotando hielo en la parte posterior de la mano, en el área palmeada entre los dedos pulgar e índice. Las vías nerviosas que estimulan una parte del cerebro bloquean las señales del dolor en la boca (esto funciona también para los dolores de cabeza).
8. Si te metiste en problemas con el alcohol y el bar empezó a dar vueltas, coloca tu mano sobre algo estable. La razón: el alcohol diluye la sangre en una parte del oído llamada cúpula, que regula el equilibrio. Poner la mano en algo estable le da al cerebro otro punto de referencia, lo que ayudará a detener el bar que esta girando.
9. Detén un sangrado de nariz poniendo un poco de algodón en la encía superior justo detrás de la pequeña abolladura por debajo de la nariz y presiona fuerte. La mayor parte de la hemorragia proviene de la pared del cartílago que divide la nariz, presionar esa zona ayuda a detener la sangre.
10. ¿Nervioso?, disminuye la frecuencia cardíaca soplando el pulgar. El nervio vago controla el ritmo cardíaco, y puede controlarse mediante la respiración.
11. ¿Necesitas más tiempo bajo el agua?, en lugar de tomar una gran bocanada de aire antes de sumergirte, provoca una hiperventilación. Mediante un grupo de respiraciones cortas vas a engañar a tu cerebro para que piense que tiene más oxígeno, y obtendrás unos 10 segundos extra.
12. Prevén el Síndrome del Cerebro congelado presionando la lengua contra el paladar, cubriendo la zona tanto como sea posible. El “cerebro congelado” ocurre cuando los nervios del paladar llegan a estar extremadamente fríos, razón por la que el cerebro cree que el cuerpo esta fría y reacciona provocando dolor de cabeza. Manteniendo esa zona cálida haces que el cerebro se sienta mejor y puedes disfrutar del helado sin dolor alguno.
13. Si tu mano queda “dormida” o entumecida mueve la cabeza de un lado a otro. Esto despertará la mano o el brazo en menos de un minuto. El entumecimiento de manos es causado por la compresión de los nervios del cuello, moviendo estos tendrás una cura, así como si un pie queda entumecido la mejor manera de aliviarlo es pararse y caminar.
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