Les presento a Rudy Eugene "El caníbal de Miami "
Una historia poco corta pero escalofriante el cual se dijo un dia
"Coja a un inocente, desnúdelo, pisotéelo, dele de patadas, mátelo. Cómalo discretamente mientras habla de otra persona”.
Rudy Eugene nació el 4 de febrero de 1981 en Haití, hijo de Ruth Eugene. Su padre biológico murió y fue adoptado a los dos años de edad por la nueva pareja de su madre, Melimon Charles, de North Miami.
Desde pequeño, Rudy leía todas las tardes la Biblia y mostraba a sus amigos algunos versículos. Tenía una enorme fe en Dios. Su familia era muy religiosa. Cuando era niño, asistía con su amigo Johansen Aurelus, a la Iglesia Bautista Behtel. Eugene hacía preguntas sobre los sermones del pastor y cómo éstos se aplicaban a su vida.
Cuando cumplió 17 años, Eugene se fue de la casa, sin decirle nada a su padrastro. Se trasladó de la Escuela Secundaria de North Miami Beach a North Miami High. Estaba preocupado debido al divorcio de sus padres.
INICIOS
Según la descripción de personas allegadas a él, era una persona dulce y de buenos modales. A veces fumaba marihuana, pero no usaba drogas fuertes. No tomaba medicamentos que no fueran recetados, ni siquiera para curar un dolor de cabeza.
Rudy Eugene y su novia Yovanka Bryant se conocieron en medio del tráfico, cuando él le pidió sus datos. Ese mismo día la llamó y empezaron a salir.
Yovanka y Rudy tuvieron una relación de cinco años, en la cual peleaban constantemente pero siempre terminaban reconciliándose.
Con el tiempo, su carácter cambió. No podía dominar su ira y estallaba con frecuencia, destruyendo lo que tuviese a su alcance. Fue arrestado en varias ocasiones por cargos de asalto. En 2004 amenazó a su madre y destrozó varios muebles durante una discusión que tuvieron. También tenía dificultades para mantener un mismo empleo.
ZOE
Su novia Yovanka declararía tiempo después: “Rudy y yo nunca hablamos sobre el canibalismo o el vudú. Yo pensé que él sería un buen padre para mis hijos. Quisiera que el público lo hubiese conocido como lo conocí yo. Yo amaba a Rudy. Me sentía segura con él. Solo lo vi fumar marihuana una vez. Nunca olvidaré la clase de hombre que fue conmigo”.
En su cuenta de Facebook, Eugene mencionaba varias veces la “Vida de Zoe”, una frase asociada tanto con la vida haitiana como con los cristianos vueltos a nacer. Un mensaje del 18 de mayo de 2012, proclamaba: “¡¡¡¡¡¡¡¡LA VIDA DE ZOE ES ETERNA!!!!!!!!”
El hombre que se convertiría en su víctima, Ronald Edward Poppo, nació en 1947 en Nueva York (Estados Unidos). Tuvo una hermana, Antoinette Poppo, y dos hermanos. Su padre trabajaba en un astillero. Creció en Brooklyn y se graduó en 1964 de la exclusiva secundaria privada Stuyvesant High. Luego fue un estudiante brillante en uno de los institutos más prestigiosos de Nueva York. Tenía un coeficiente de 129, por encima del promedio. No se sabe cómo Poppo fue descendiendo hasta convertirse en un indigente, que vagaba por las calles robando o recogiendo basura. Perdió el contacto con su familia por más de treinta años. Poppo parece haber vivido sin dirección fija desde los años setenta. En 1976, reportó vivir en un albergue para desamparados del Ejército de Salvación en Miami. A finales de los ochenta, Poppo trabajó como ayudante del grupo musical SKUM, que pasó alrededor de dos años en Miami antes de separarse alrededor de 1990. Parte de la filosofía del grupo era contratar a desamparados para cargar sus equipos.
Su novia Yovanka declararía tiempo después: “Rudy y yo nunca hablamos sobre el canibalismo o el vudú. Yo pensé que él sería un buen padre para mis hijos. Quisiera que el público lo hubiese conocido como lo conocí yo. Yo amaba a Rudy. Me sentía segura con él. Solo lo vi fumar marihuana una vez. Nunca olvidaré la clase de hombre que fue conmigo”.
En su cuenta de Facebook, Eugene mencionaba varias veces la “Vida de Zoe”, una frase asociada tanto con la vida haitiana como con los cristianos vueltos a nacer. Un mensaje del 18 de mayo de 2012, proclamaba: “¡¡¡¡¡¡¡¡LA VIDA DE ZOE ES ETERNA!!!!!!!!”
El hombre que se convertiría en su víctima, Ronald Edward Poppo, nació en 1947 en Nueva York (Estados Unidos). Tuvo una hermana, Antoinette Poppo, y dos hermanos. Su padre trabajaba en un astillero. Creció en Brooklyn y se graduó en 1964 de la exclusiva secundaria privada Stuyvesant High. Luego fue un estudiante brillante en uno de los institutos más prestigiosos de Nueva York. Tenía un coeficiente de 129, por encima del promedio. No se sabe cómo Poppo fue descendiendo hasta convertirse en un indigente, que vagaba por las calles robando o recogiendo basura. Perdió el contacto con su familia por más de treinta años. Poppo parece haber vivido sin dirección fija desde los años setenta. En 1976, reportó vivir en un albergue para desamparados del Ejército de Salvación en Miami. A finales de los ochenta, Poppo trabajó como ayudante del grupo musical SKUM, que pasó alrededor de dos años en Miami antes de separarse alrededor de 1990. Parte de la filosofía del grupo era contratar a desamparados para cargar sus equipos.
Poppo dormía en Watson Island y era alcohólico. Se quedó en un albergue de emergencia durante 141 días, durante los cuales vio a un consejero una sola vez. En 1995, fue acusado y aprehendido por portar un arma de fuego sin permiso y resistirse al arresto de manera violenta. Cuatro años después, la policía de Miami lo llevó de regreso al albergue. A partir del 6 de octubre del 2003, Poppo se quedó allí durante diez días y volvió a ver a un consejero una vez. Entre esa estancia y su último encuentro con trabajadores sociales el 24 de mayo, Poppo pasó menos de una semana bajo techo. Se quedó dos veces en Camillus House en el 2004, el 26 de enero y el 20 de julio, y una vez en el Centro de Asistencia a Desamparados el 16 de noviembre. Su última estancia fue el 23 de enero del 2005, en un programa de albergue por el frío. El 11 de noviembre del 2004, una “crisis mental’’ de algún tipo lo llevó a la unidad de intervención de crisis del Jackson, pero un informe del programa no deja claro si pasó la noche allí. Trabajadores sociales lo abordaron tres veces en el 2005 y el 2006, pero rechazó toda ayuda. A veces les tiraba piedras a los trabajadores sociales.
Mientras tanto, Rudy Eugene había estado buscando guía espiritual en la Biblia. El 24 de mayo, asistió a una sesión de estudio de la Biblia en la casa de un amigo en North Miami Beach. Casi enseguida, Eugene colocó un versículo del Salmo 59 en su página de Facebook: “Sálvame de mis enemigos, Oh, mi Señor. Defiéndeme de los que se levantan en mi contra. Porque el Señor Dios es mi defensa…” Un amigo suyo, Bobby Chery, discutió con él acerca de que podían convertirse en mejores hombres de acuerdo con la palabra de Dios. Eugene prometió dejar la marihuana.
El viernes 25 de mayo, Eugene estuvo con su chica celebrando el Memorial Day y después se fue a una fiesta en la playa. Según contaría su novia, se mostró extraño esa noche y comenzó a buscar algo entre sus ropas. La madrugada del sábado 26 de mayo de 2012, Rudy Eugene despertó a Yovanka a eso de las 05:30 horas, para decirle que iba a reunirse con un amigo. Eugene no dijo el nombre de su amigo, ni el lugar donde se verían.
“Le dije que se cuidara y que yo también lo amaba. Cuando salió por la puerta, la cerré y seguí durmiendo”, indicó la chica. Añadió que le pareció raro que él saliera de la casa tan temprano, pero no preguntó nada más. A eso de las 06:30 horas, Eugene llamó a Yovanka para decirle que su auto se había averiado y que regresaría tarde a la casa. Esa fue la última vez que conversó con él.
Ese mismo día, la policía sacó a Poppo de uno de los últimos lugares que él llamaba su hogar: el último piso del estacionamiento en Jungle Island, la atracción botánica y de la vida salvaje de Watson Island. Trabajadores del Programa de Asistencia a los Desamparados de Miami lo encontraron allí y le ofrecieron ayuda, pero Poppo se mostró agresivo. El equipo de alcance llamó a la policía. Los agentes expulsaron a Poppo, quien había cumplido 65 años una semana antes, y le dieron una citación por entrar en una propiedad privada luego de una advertencia. El tomó una caja con sus pertenencias y se fue.
En algún momento de esa jornada, Eugene consumió una fuerte dosis de la droga conocida como “sales de baño”, una droga alucinógena que tiene un aspecto y efectos similares a los de la cocaína sintética y contiene metilendioxipirovalerona (MDPV). Además de darle al consumidor una fuerza descomunal, acelera su ritmo cardiaco, aumenta la presión sanguínea y produce un calor interno potente, que trae como consecuencia que las personas se desnuden. Esta droga tiene el efecto adicional de suprimir el dolor en quienes la consumen, lo que ayuda a que los consumidores no reaccionen ante la violencia física.
Bajo sus potentes efectos, Rudy Eugene inició a pie el camino de vuelta a su casa, a unos cinco kilómetros, bajo un calor de más de 32 grados. Para entonces, la temperatura de su propio cuerpo había aumentado de manera alarmante, al grado de que empezó a quitarse la ropa hasta quedar desnudo. Sentía que se quemaba por dentro. Luego llegó un ansia irrefrenable por comer carne humana. La gente que se cruzaba con él notaba la mirada extraviada en aquel joven que avanzaba desnudo, pero resuelto. No sabían el incidente que estaba a punto de ocurrir y que daría la vuelta al mundo.
A las 14:00 horas, los destinos de Rudy Eugene y Ronald Poppo se cruzaron. Poppo se encontraba tumbado en su cartón, en la Avenida MacArthur. Eugene, desnudo, lo agarró cerca del extremo oeste del puente, le quitó la ropa, lo golpeó a puñetazos y le dio de patadas. Después decidió satisfacer su ansia: comenzó a morderlo y a devorarle el rostro.
Larry Vega, un ciclista que pasaba por allí y vio la terrible escena, avisó a la policía. Pasaron más de dieciocho minutos del ataque para que llegaran los agentes. Durante todo ese tiempo, Ronald Poppo permaneció consciente, aunque la fuerza terrible de Eugene lo inmovilizó por completo. Los mordiscos le arrancaron las mejillas, la frente, la nariz, los ojos, los labios, hasta devorar el 75 % de su cara.
José Rivera, agente del Departamento de la Policía de Miami, llegó al lugar. Al toparse con la dantesca escena, le exigió a Eugene se detuviera. Este volteó a verlo y gruñó mientras de su boca ensangrentada caía un pedazo de carne. Luego de varios intentos para detenerlo, el policía finalmente decidió dispararle, pero al percatarse de que este no cedía, disparó de nuevo hasta que finalmente Eugene cayó abatido por los disparos.
Las cámaras de vigilancia del periódico The Miami Herald habían grabado toda la escena. La ambulancia llegó poco después y los rescatistas vieron la escena, horrorizados. Ni siquiera atinaban a entender de qué se trataba. Trataron de estabilizar al herido, dominando su propio espanto. Poppo ingresó en condición crítica en el Centro de Traumas Ryder del Hospital Jackson Memorial.
Entre tanto, al ver que no regresaba, la novia de Eugene comenzó a preocuparse y salió a buscarlo. "No podía hacer nada, estaba preocupada y le dejé mensajes en su teléfono móvil: ‘Rudy, llámame, estoy muy preocupada’". No hubo respuesta.
Los noticiarios de todo el mundo y los medios de información difundieron de inmediato detalles y fotografías de aquel evento. Bautizaron a Eugene como “El Caníbal de Miami”.
Paradójicamente, el hecho de que hubiese consumido la droga conocida como “sales de baño” hizo que esta se volviese muy popular: muchos querían convertirse en zombies devoradores.
CONSECUENCIAS
El domingo, Yovanka continuó buscando a Eugene. El lunes en la mañana recibió una llamada de la familia de su novio: "Rudy está muerto", le dijeron. Fue entonces cuando se enteró de que él era “El Caníbal de Miami”, que se trataba del mismo sujeto que la policía sorprendió en medio de un enloquecido acto de antropofagia. Al respectó, declararía: “De inmediato empecé a gritar. No sé cuándo colgué el teléfono, me puse histérica. Nunca volveré a ser la misma”.
La madre de Eugene también trató de limpiar el nombre de su hijo, inclusive dio una entrevista a la CBS donde aseguró: "Todo el mundo dice que era un zombie, pero no es así. Era mi hijo. Nunca me dio problemas. Era bueno".
Ronald Poppo sobrevivió al ataque y fue sometido a incontable operaciones. Poco pudo salvarse de su rostro. Quedó ciego y desfigurado. Pese a ello, cientos de personas le enviaron mensajes de aliento y contribuyeron económicamente para pagar sus tratamientos.
Sin ojos y sin nariz, Poppo declararía estar feliz y agradecido por las muestras de apoyo recibido durante su estancia en el hospital, tanto a través de donaciones económicas, como de mensajes de ánimo y regalos.
Aprendió a vestirse, alimentarse, bañarse y afeitarse solo; terminó viviendo en una clínica de cuidados prolongados al sur de Miami, donde se dedicaba a tocar la guitarra.
El domingo, Yovanka continuó buscando a Eugene. El lunes en la mañana recibió una llamada de la familia de su novio: "Rudy está muerto", le dijeron. Fue entonces cuando se enteró de que él era “El Caníbal de Miami”, que se trataba del mismo sujeto que la policía sorprendió en medio de un enloquecido acto de antropofagia. Al respectó, declararía: “De inmediato empecé a gritar. No sé cuándo colgué el teléfono, me puse histérica. Nunca volveré a ser la misma”.
La madre de Eugene también trató de limpiar el nombre de su hijo, inclusive dio una entrevista a la CBS donde aseguró: "Todo el mundo dice que era un zombie, pero no es así. Era mi hijo. Nunca me dio problemas. Era bueno".
Ronald Poppo sobrevivió al ataque y fue sometido a incontable operaciones. Poco pudo salvarse de su rostro. Quedó ciego y desfigurado. Pese a ello, cientos de personas le enviaron mensajes de aliento y contribuyeron económicamente para pagar sus tratamientos.
Sin ojos y sin nariz, Poppo declararía estar feliz y agradecido por las muestras de apoyo recibido durante su estancia en el hospital, tanto a través de donaciones económicas, como de mensajes de ánimo y regalos.
Aprendió a vestirse, alimentarse, bañarse y afeitarse solo; terminó viviendo en una clínica de cuidados prolongados al sur de Miami, donde se dedicaba a tocar la guitarra.
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