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sábado, 11 de mayo de 2013

Venganza a una dama - por : Mariana Isabel Cueto Zorola



Parte 1

He sido testigo del final;
He caído de rodillas en el rio de las almas,
Ellos proclaman mi caída, mi fin.
Tantos años pudriéndome en mi locura.

He llorado por ti, lo admito,
Tú quien me ha orillado a este momento.
La única luz de mi vida.

Tu silencio ha desatado mi locura,
pero te desvaneces en la luz del orden.
Tu final ha marcado el final de todos.

Mis lágrimas caen, a sabiendas
que no pude protegerte como,
te he jurado en cada noche de pasión

Cariño, que te han hecho. Me arrepiento,
me arrepiento por primera vez en mi vida,
me arrepiento de todo lo que no hice a tu lado

Este crimen no quedara impune.
La luz me guiara al culpable,
las estrellas lo carbonizaran.
La sangre correrá, y su alma descansara
nadie más que la más hermosa de las flores.
Se ha marchitado, por los designios DEL ORDEN y EL TIEMPO.

La oscuridad no mostrara piedad.
Ahora estoy ebrio de venganza,
hoy la serenata del fin tendrá lugar.


Parte 2


El orden ni el caos son perfectos ni eternos,
se contradicen en su vaivén eterno. Oh hermano
hermano, ¿acaso no puedes sonreír a su lado?
¿Es por eso que las rosas se tiñen de rojo, Am Dhaegar?
Ella era mi dicha, mis ilusiones,
eran mis sueños y esperanzas,
también mis llantos, penas. Y mi dolor
ahora yace en la eternidad del silencio

Oh hermano, universal orden,
corrompido por su belleza y tu ignorancia.
Creíste que imperfecta era, ella era mía
tu quien eres todo, no eres nada

Ella encausaba mi locura y curaba mis heridas,
mi felina llenaba mi vacío interior,
aquel vacío que ni la sangre llena.
Tendrá que saciarse con tu pútrida sangre


Parte 3

Me enfrento a ti Am Dhaegar, hermano.
En un principio solía temerte, pero debo enfrentarte
ante tu egolatría de entendimiento
me has arrastrado al final antes de tiempo
Aunque mis ojos estén cubiertos de lágrimas,
las sombras te atraparan, despedazándote.
Mi estrella tomara tu esencia y la destruirá,
ya que por más fuerte que seas, escoria eres.

Herido y cansado estoy, amor mío.
Sin embargo, aún no he terminado
tu espíritu está presente, lo sé.
Tú siempre velaste por mi bien
He caído dormido, soñando
los días que pase junto a ti
estas imágenes, imágenes de ti
son mi tesoro más preciado.

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