Capítulo "Son tan iguales...¿Quien es la pequeña niña?
Capitulo 5.
Vi que una silueta negra atravesó el vidrio. Ambos se miraron.
-Al fin te encontré, Jeff the Killer.- su voz femeninamente raposa inundo la habitación.
-Siempre en los momentos más inoportunos...Jane.-
La tensión se podía tocar. Jeff se levantó y desenterró el cuchillo de mi pierna. Trate de no hacer ruido…
-Jugaremos más tarde, Sarah. Esto no tardara nada…-
Me observo, sin evitar lamer el cuchillo de una forma tan tétrica que los cabellos de mi nuca se erizaron.
-No dejare que lastimes a esta niña como lo hiciste conmigo…- dijo la chica.
¿A qué se refería? Note que mi pierna había dejado de sangrar y trate de levantarme.
Los mire detenidamente, ambos eran iguales.
Del suéter de la chica, voló una cuchilla…¿Cómo arte de magia? Un truco muy barato que hasta a mí me impresionaría.
La mire impresionada. Podría ser unos años mayor que yo…tal vez de la misma edad que Jeff. Vestía un suéter negro y su cabello ondulado llegaba a su cintura. Sus grandes ojos eran negros…totalmente. Tenía unas grandes pestañas y las uñas de sus manos estaban negras.
Se pusieron en posición…y la primera en atacar fue la chica. Un gran movimiento que Jeff bloqueo con el cuchillo, de ahí Jeff tomo el brazo de la chica y lo rasgo dejando salir un poco de sangre.
La chica lo empujo y rasgo su mejilla, Jeff la miro divertido y se abalanzó sobre ella. Le comenzó a dar de golpes, uno y uno...
Después de varios minutos, Jeff seguía golpeándola.
-Ya me aburriste, Jane…- dijo serio Jeff, tomando el cuchillo de nuevo y lo encajo en el dorso de jane.-
La chica se engarroto y trató de detenerlo. Sentí impotencia al no poder ayudarla.
La seguía apuñalando, el dorso de jane parecía fuente de sangre. Y jeff Comenzó a reír como un loco.
Deje alado mi cobardía y me pare rápidamente de donde estaba escondida, y solo gritaba. ”Jeff! Por favor! Detente…” Pero este no se detenía, el solo estaba ahí como si estuviera programado para apuñalarla.
-¡JEFF!- grite como nunca. El se detuvo y me miro como si no supiera lo que estaba haciendo.- ¡Mira lo que haces!- dije entre lágrimas, el solo se miraba sorprendido. Miro a su alrededor y se levantó.
Se acercó a mí con el cuchillo.
-¡A-ALEJATE!- fue lo único que pude articular.
-¿Yo…te hice daño?- me miro preocupado
Jeff parecía un niño pequeño que no sabía, lo que había hecho. Se miró sus manos llenas de sangre. Su mirada cambio, parecía como si fuera a llorar.
-Sarah…yo…- su rostro realmente parecía arrepentido, pero cambio rápidamente.- ¡Te dije que te alejaras de mí!- salto por la ventana y corrió hacia el bosque.
Ahora no podía darle importancia a Jeff. En estos momentos me tenía que preocupar lo chica. No podía ir a un hospital, mi abuela tiene un botiquín de emergencia. Fui rápidamente a la habitación de mi abuela, con ese típico olor a cigarro y a ese perfume que tanto le gustaba usar. Me dirigí con velocidad al baño y tome todo el botiquín.
Regrese a mi habitación, le quite con cuidado a la chica su suéter negro. Ya había perdido mucha sangre, todo el suelo estaba manchado. Tome el alcohol y deje caer un poco sobre las heridas de Jane, ella solo pudo hacer algunos sonidos.
Fije mi mirada en aquellas cicatrices de su cuerpo. Todo su abdomen estaba lleno…¿podrá ser que ellos ya se habían enfrentado antes? Tome la aguja, respire hasta el fondo y comencé a cerrar sus heridas.
“Lo siento, lo siento, lo siento…” Solo podía decir eso…
Después de unos minutos de angustia, ya podía respirar. La sangre había parado y la chica comenzaba a respirar normalmente…ahora solo parecía dormir.
Mi cuerpo ya no daba para más…mis piernas comenzaron a temblar y mi visión era casi nula.
Unas horas después abrí mis ojos, gire mi vista y para mi sorpresa no estaba en mi habitación…para ser sincera no sabía en dónde diablos estaba. Un lugar demasiado tétrico. Parecía un campo santo… más tranquilo.
Me levante poco y comencé a mirar a mi alrededor. Alguna señal de alguien…no había nada.
Comencé a caminar, tal vez encontraba algo.
Mientras más caminaba más me daba cuenta que estaba perdida. Llegue al punto donde no sabía si vería otra vez a mi abuela. Pareciera que alguien me seguía, escuchaba como los pedacitos de varillas o madera comenzaban a tronar. La risa de una pequeña niña se escuchaba por todo el lugar. Los cabellitos de mi nuca se erizaron por completo, en un parpadeo una pequeña niña se encontraba enfrente de mí.
¿Qué demonios pasa? ¿Sera un sueño?
La niña se veía algo mal...su piel estaba cortada con muchas raspaduras, su delicado camisón estaba rasgado y manchado de barro. De su rostro goteaba algo parecido a la sangre…un momento. ¿Era sangre? Mire con mayor enfoque y en efecto de rostro goteaba sangre. ¿Habrá tenido un accidente? Me acerque mas…
-Pequeña…¿estas bien?
Ella solo estaba ahí sin hacer nada. Solo de pie
-¿Te heriste? ¿Dónde están tus padres?
Me miro y mi cuerpo sintió un miedo terrible, la mirada de la niña. Esos ojos verdes claros estaban podridos. Ella lucia totalmente mal.
Cargaba con ella un osito de peluche, idéntico a uno que mi padre me regalo. La niña se comenzó a reír. ¿sentirá mi miedo?
-Ellos…ya están buscándote. Al fin, dicen…Al fin encontraran a la chica que les hizo falta hace años.
Comencé a retroceder. ¿A qué se refiere? Retrocedí hasta que me caí por la culpa de unas ramas. La pequeña niña se acercó más lentamente.
-¿Quieres jugar conmigo, Sarah?...- la voz chillona de la niña hizo que mi cuerpo comenzara a temblar. Gire mi rostro y nuestro alrededor se comenzó a incendiar, lo que provoco que la niña comenzara a gritar. No comprendí en ese instante que pasaba pero al parecer el fuego le asustaba y tenía que sacarla de allí. Tome su mano y corrimos. Corrimos y corrimos hasta que por fin salimos del lugar que se incendiaba, la pequeña comenzaba a recuperar su aliento.
-¿Por qué me sacaste de ese lugar?- dijo suavemente.
-No te preocupes a mí también me da miedo el fuego-. dije tratando de recuperar mi aliento.
-Eres muy dulce- susurro
La mire desconcertada y puse mi mano en su frente.
-¿Te encuentras bien?
-Si...-dijo mirando al suelo – No debiste ayudarme…El te vio hacerlo…ahora va a matarnos…-sonrió-
snowy_crystal
Vi que una silueta negra atravesó el vidrio. Ambos se miraron.
-Al fin te encontré, Jeff the Killer.- su voz femeninamente raposa inundo la habitación.
-Siempre en los momentos más inoportunos...Jane.-
La tensión se podía tocar. Jeff se levantó y desenterró el cuchillo de mi pierna. Trate de no hacer ruido…
-Jugaremos más tarde, Sarah. Esto no tardara nada…-
Me observo, sin evitar lamer el cuchillo de una forma tan tétrica que los cabellos de mi nuca se erizaron.
-No dejare que lastimes a esta niña como lo hiciste conmigo…- dijo la chica.
¿A qué se refería? Note que mi pierna había dejado de sangrar y trate de levantarme.
Los mire detenidamente, ambos eran iguales.
Del suéter de la chica, voló una cuchilla…¿Cómo arte de magia? Un truco muy barato que hasta a mí me impresionaría.
La mire impresionada. Podría ser unos años mayor que yo…tal vez de la misma edad que Jeff. Vestía un suéter negro y su cabello ondulado llegaba a su cintura. Sus grandes ojos eran negros…totalmente. Tenía unas grandes pestañas y las uñas de sus manos estaban negras.
Se pusieron en posición…y la primera en atacar fue la chica. Un gran movimiento que Jeff bloqueo con el cuchillo, de ahí Jeff tomo el brazo de la chica y lo rasgo dejando salir un poco de sangre.
La chica lo empujo y rasgo su mejilla, Jeff la miro divertido y se abalanzó sobre ella. Le comenzó a dar de golpes, uno y uno...
Después de varios minutos, Jeff seguía golpeándola.
-Ya me aburriste, Jane…- dijo serio Jeff, tomando el cuchillo de nuevo y lo encajo en el dorso de jane.-
La chica se engarroto y trató de detenerlo. Sentí impotencia al no poder ayudarla.
La seguía apuñalando, el dorso de jane parecía fuente de sangre. Y jeff Comenzó a reír como un loco.
Deje alado mi cobardía y me pare rápidamente de donde estaba escondida, y solo gritaba. ”Jeff! Por favor! Detente…” Pero este no se detenía, el solo estaba ahí como si estuviera programado para apuñalarla.
-¡JEFF!- grite como nunca. El se detuvo y me miro como si no supiera lo que estaba haciendo.- ¡Mira lo que haces!- dije entre lágrimas, el solo se miraba sorprendido. Miro a su alrededor y se levantó.
Se acercó a mí con el cuchillo.
-¡A-ALEJATE!- fue lo único que pude articular.
-¿Yo…te hice daño?- me miro preocupado
Jeff parecía un niño pequeño que no sabía, lo que había hecho. Se miró sus manos llenas de sangre. Su mirada cambio, parecía como si fuera a llorar.
-Sarah…yo…- su rostro realmente parecía arrepentido, pero cambio rápidamente.- ¡Te dije que te alejaras de mí!- salto por la ventana y corrió hacia el bosque.
Ahora no podía darle importancia a Jeff. En estos momentos me tenía que preocupar lo chica. No podía ir a un hospital, mi abuela tiene un botiquín de emergencia. Fui rápidamente a la habitación de mi abuela, con ese típico olor a cigarro y a ese perfume que tanto le gustaba usar. Me dirigí con velocidad al baño y tome todo el botiquín.
Regrese a mi habitación, le quite con cuidado a la chica su suéter negro. Ya había perdido mucha sangre, todo el suelo estaba manchado. Tome el alcohol y deje caer un poco sobre las heridas de Jane, ella solo pudo hacer algunos sonidos.
Fije mi mirada en aquellas cicatrices de su cuerpo. Todo su abdomen estaba lleno…¿podrá ser que ellos ya se habían enfrentado antes? Tome la aguja, respire hasta el fondo y comencé a cerrar sus heridas.
“Lo siento, lo siento, lo siento…” Solo podía decir eso…
Después de unos minutos de angustia, ya podía respirar. La sangre había parado y la chica comenzaba a respirar normalmente…ahora solo parecía dormir.
Mi cuerpo ya no daba para más…mis piernas comenzaron a temblar y mi visión era casi nula.
Unas horas después abrí mis ojos, gire mi vista y para mi sorpresa no estaba en mi habitación…para ser sincera no sabía en dónde diablos estaba. Un lugar demasiado tétrico. Parecía un campo santo… más tranquilo.
Me levante poco y comencé a mirar a mi alrededor. Alguna señal de alguien…no había nada.
Comencé a caminar, tal vez encontraba algo.
Mientras más caminaba más me daba cuenta que estaba perdida. Llegue al punto donde no sabía si vería otra vez a mi abuela. Pareciera que alguien me seguía, escuchaba como los pedacitos de varillas o madera comenzaban a tronar. La risa de una pequeña niña se escuchaba por todo el lugar. Los cabellitos de mi nuca se erizaron por completo, en un parpadeo una pequeña niña se encontraba enfrente de mí.
¿Qué demonios pasa? ¿Sera un sueño?
La niña se veía algo mal...su piel estaba cortada con muchas raspaduras, su delicado camisón estaba rasgado y manchado de barro. De su rostro goteaba algo parecido a la sangre…un momento. ¿Era sangre? Mire con mayor enfoque y en efecto de rostro goteaba sangre. ¿Habrá tenido un accidente? Me acerque mas…
-Pequeña…¿estas bien?
Ella solo estaba ahí sin hacer nada. Solo de pie
-¿Te heriste? ¿Dónde están tus padres?
Me miro y mi cuerpo sintió un miedo terrible, la mirada de la niña. Esos ojos verdes claros estaban podridos. Ella lucia totalmente mal.
Cargaba con ella un osito de peluche, idéntico a uno que mi padre me regalo. La niña se comenzó a reír. ¿sentirá mi miedo?
-Ellos…ya están buscándote. Al fin, dicen…Al fin encontraran a la chica que les hizo falta hace años.
Comencé a retroceder. ¿A qué se refiere? Retrocedí hasta que me caí por la culpa de unas ramas. La pequeña niña se acercó más lentamente.
-¿Quieres jugar conmigo, Sarah?...- la voz chillona de la niña hizo que mi cuerpo comenzara a temblar. Gire mi rostro y nuestro alrededor se comenzó a incendiar, lo que provoco que la niña comenzara a gritar. No comprendí en ese instante que pasaba pero al parecer el fuego le asustaba y tenía que sacarla de allí. Tome su mano y corrimos. Corrimos y corrimos hasta que por fin salimos del lugar que se incendiaba, la pequeña comenzaba a recuperar su aliento.
-¿Por qué me sacaste de ese lugar?- dijo suavemente.
-No te preocupes a mí también me da miedo el fuego-. dije tratando de recuperar mi aliento.
-Eres muy dulce- susurro
La mire desconcertada y puse mi mano en su frente.
-¿Te encuentras bien?
-Si...-dijo mirando al suelo – No debiste ayudarme…El te vio hacerlo…ahora va a matarnos…-sonrió-
snowy_crystal
No hay comentarios. :
Publicar un comentario