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sábado, 17 de mayo de 2014

Sebastian "Cry" Gunney

No todos los locos son locos desde siempre , algunos tendran problemas mentales de nacimiento, pero algunos simplemente se vuelven locos por cosas que le pasan en la vida, por ejemplo:

El mayor asesino jamás registrado es Jeffrey Woods,mejor conocido como Jeff "The Killer" Pero nadie le ve a el y los que le ven, simplemente mueren, pero este es un nuevo caso, hablamos de Sebastian Gunney.

Sebastian no es un chico cualquiera, para nada, nunco tuvo amigos, no tuvo hermanos, nunca tuvo una vida social muy buena, mucha gente preguntaria porque, muy sencillo: Sebastian creía en lo paranormal, era un paranóico con ese tipo de cosas, pero a el no le importaba no tener amigos, el le gustaba estar solo, leyendo libros y viendo programas de lo paranormal, pero esto no tiene mucha que ver ahora mismo. Sebastian siempre fue un chico amable, todos los vecinos lo querian y su familia también y él lo sabía. Su familia era muy buenas para otros y odiada por otros, ya que era una familia rica y con poderes en algunas partes de la ciudad.

Un dia, Sebastian llegó a casa extrañado a un olor a quemado, pero no le dió mucha importancia y creyó que algunos vecinos estarían  haciendo una barbacoa, entró en su casa, con ganas d ever a sus padres, porque ese día estaba cansado de las diarias humillaciones de las personas de su instituto, entró en su casa y vió a sus padres muertos, todo lleno de sangre y llenos de gasolina y al final del salón había un hombre con un pasamontañas que disparo, de manera increible, y le dio en el hombro a Sebastian.

Sebastian estaba tirado en el suelo, con un dolor que nunca había sentido en su vida, en el suelo, vió como el hombre prendió fuego a la gasolina y se quemó a la casa, el con una descarga de adrenalina, salió de la casa en llamaas, salió corriendo y se tropezó bruscamente con un escalón, lo último que vió Sebastian antes de desmayarse entre sollozos, como su casa se prende fuego y como la policia y los bomberos llegan a la casa.


Pasaron días, y Sebastian despertó, se despertó confundido al principio, no sabía donde estaba, estaba pensando hasta que dicidió levantarse, pero gritó al notar un enorme dolor en su cuerpo, sobre todo en su hombro, llegó la enfermera y le dijo que se tranquilizara, Sebastian gritando y llorando preguntando:

-¡¿Dónde están mis padres!?¡¿Donde están!?- Sebastian estaba confundido, se notaba un hombre nuevo, pero seguía sintiendo lo que le pasaba pero como si hubiese un doble en él.

Sebastian se sentía solo, pero como si algo que nunca hubise sentido se apoderara de él, le tuvieron que poner un sedante para poder hacer que se callase. Sl cabo de un tiempo se despertó y oyó a los médicos hablando sobre él y le dicen que no saben hacer con él chico, ya que no tenía parientes cercanos, pero llegó un enfermero en prácticas, y dijo que el chico se podía quedar en su casa unos días, llegaron a su casa y Sebastian, de una manera o de otra, Sebastian siempre sonreía, y cuando les recordaban a sus padres, sonreía mucho mas y reía.

Sebastian llegó a un extremo que ya parecía un loco a punto de matar a alguien, el enfermero sentía su presencia, como Sebastian siempre le vigilaba, un día, Sebastian fue una noche a un sitio que nunca se ha sabido donde era, y al cabo de una hora, volvió a casa con una mochila, como era tarde, el enfermero dormía, Sebastian entró en la habitación de su compañero, y le apunto con un arma, la cargó, pero els onido despertó al enfermero, él se asusto y el pregunto que hacía exclamando, a lo que Sebastian respondió:

-¿Cómo te sentirías si toda tu vida te han maltratado, y que un dia cuando llegas a tu casa, que es donde están las personas que mas quieres, y están  todas muertas?¿Cómo te sentirías?Como si tu vida no la compraría ni el mismísimo diablo-Dijo Sebastian sonriendo, pero se le saltaba una lágrima por la mejilla. El enfermero le dijo:

-Sebastian, yo soy una buena persona, porfavor no me mates, tengo familia- A lo que Sebastian respondió:

-¡Calla!- Y se rió - Yo no tengo familia, no tengo nadie a quién acudir, las voces de mi cabeza me piden que acabe de una vez contigo.-El enfermero empezó a llorar y a rogar, pero el Sebastian, con su sonrisa perdida y sádica, le dijo.

-Te quiero decir una cosa, no tienes derecho a llorar.

Sebastian disparó el arma pero falló muchos tiros ya que el enfermero, a gran velocidad esquivó las balas y salió corriendo. Sebastian ya no tenía balas, fué a un estante, lo partió en dos y cogió un machete, ya que el enfermero era amante de la naturaleza.
Sebastian salió corriendo a en busqueda del enfermero, estaba en frente del teléfono a punto de llamar a la policia, Sebastian, con una sonrisa implecable, le clavó el machete en el pecho, Sebastian se quedó parado viendo como el enfermero tosía sangre y salían sus entrañas, casi con el corazón en la garganta, Sebastian le sacó el machete con fuerza y salió corriendo ya que oyó las sirenas de la policía, ya que algún vecino oiría los disparos.
Salió por la ventana, con el machete. Sebastian tiene 16 años, se le caracteriza por tener el pelo largo y rúbio, la piel blanca pero al mismo tiempo, morena, ojos marrones, y ser flaco con un gran atractivo, pero se le caracteríza por su sonrisa y su machete que esconde, si le ven, no duden en llamar a la policía, porque si no, se encontraría en un gran problema, ya que a el, no le gustan que le reconozcan, pero sobre todo, no llores, ya que no tienes derecho a llorar.

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